El último deseo. - Andrzej Sapkowski.

Título: El último deseo.
Título original: Ostatnie Zyczenie.
Autor: Andrzej Sapkowski.
Saga: Geralt de Rivia #1 (de 7)
Páginas: 250
Editorial: Alamut

Sinopsis: Geralt de Rivia, brujo y mutante sobrehumano, se gana la vida como cazador de monstruos en una tierra de magia y maravilla: con sus dos espadas al hombro -la de acero para hombres, y la de plata para bestias- da cuenta de estriges, mantícoras, grifos y vampiros, quimeras y lobisomes, pero sólo cuando amenazan la paz. Irónico, cínico, descreído y siempre errante, sus pasos le llevan de pueblo en pueblo ofreciendo sus servicios, hallando la más de las veces que los auténticos monstruos se esconden bajo rostros humanos. En su camino sorteará intrigas, elegirá el mal menor, debatirá cuestiones de precio, hollará el confín del mundo y realizará su último deseo: así comienzan las aventuras del brujo Geralt de Rivia.

El último deseo es el primer libro de la saga de Geralt de Rivia, un brujo cuyo trabajo es librar a la gente de las monstruosas criaturas que existen en esta tierra de fantasía y hacen correr peligro, incluso arrebatan la vida de los demás.

El libro está dividido en siete capítulos con varias partes cada uno. La primera parte transcurre en el presente, en el santuario donde se encuentra el brujo, al cuidado de una sacerdotisa, Nenneke, quien se está encargando de curar las heridas que le alcanzaron en un enfrentamiento. El presente siempre aparece en la primera parte de cada capítulo, y el resto, son sucesos que recuerda, y nos invitan a conocer mejor a este Brujo, que lo ha vivido y visto todo.

Fue separado de su familia cuando era pequeño, y ejercieron sobre él las mutaciones necesarias para convertirlo en Brujo. Asumió el cambio, y según cuenta, lo someten a algunos más complejos, y sólo él sobrevivió.

Geralt conoce hechizos a los que llaman "señales", pero sus armas más letales son sus dos espadas, una de acero (supuestamente para los hombres) y otra de plata para las bestias. Al cuello le cuelga un medallón con la Señal de la Escuela del Lobo.

Lo que me ha impresionado de este libro es la agilidad con la que se lee. La ambientación está muy bien construida, los diálogos son muy naturales y en ocasiones con un toque de humor. Y, además, algo que no me habría esperado si Ángela no me lo llega a contar: sus capítulos están basados y juegan con maravillosas historias como son La Bella y la Bestia, Blancanieves y Aladín pero con personajes y con el toque de Sapkowski.

Geralt no es el típico héroe simpático, divertido, gracioso, con un físico perfecto y una personalidad que derrite. No. No es de ese tipo de héroes. Geralt es cínico, sarcástico y realmente complejo, con un toque de humano detrás de su fachada de brujo. Y es un brujo que a lo largo de los años, ha llegado a la conclusión de que los verdaderos monstruos quizá no sean las silvias, los vampiros, abejorros, estriges y kikimoras (que lo son), sino el mismísimo ser humano.

—A la gente —Geralt volvió la cabeza— le gusta inventarse monstruos y monstruosidades. Entonces se parecen menos monstruosos a sí mismos. Cuando beben como una esponja, engañan, roban, le dan palos a su mujer, matan de hambre a su vieja abuelilla, golpean con un hacha a la raposa atrapada en el cepo o acribillan a flechazos al último unicornio del mundo, les gusta pensar que sin embargo todavía es más monstruosa que ellos la Muaré que entra en las casas a la aurora. Entonces, como que se les quita un peso de encima. Y les resulta más fácil vivir.

Lo recomiendo. Es un libro a rebosar de personajes variopintos, con una lectura sencilla (aunque cuando hablaba con los "catetos" me liaba un poco) y una historia de lo más entretenida.

La Biblioteca de Cristal